Estos próximos días 2, 3 y 4 de Septiembre de 2011 se celebrará la XXVI FERIA DE ARTESANÍA esta edición lleva el título de mimbres para nuevos tiempos, dentro de esta importante feria la Asociación Cultural Pinolere promueve El Premio Artesanía y Patrimonio Villa de La Orotava. Este premio que concede el Ayuntamiento de La Orotava a propuesta de dicha A.C. Pinolere ha recaído en esta su VIII edición a las panaderías artesanales y tradicionales del municipio. La finalidad de este galardón es reconocer públicamente la labor de las personas e instituciones que mantienen los oficios artesanos y favorecen su divulgación.
Panadería El Valle ha sido una de las galardonadas ¿ y por qué estas líneas desde este blog ? En primer lugar por el rico sabor de pan que nos ofrece día tras día, desde la antigua Babilonia hasta hoy el hombre ha disfrutado y también se ha peleado por él. En segundo lugar por una razón muy directa; llevo trabajando en esa Panadería El Valle ( Solopan, S.L) desde hace 25 años lo que me ha hecho enriquecer mi pasión por los sabores. En ese sentido comentarles que también imparto un taller de pan y vino , digamos que curioso.
Volviendo a la Panadería El Valle que es la protagonista estos días y en especial el 2 septiembre de 2011 a las 12.00 cuando se le hara entrega del galardón durante el acto inaugural de dicha feria.
La Panadería que cuenta con más de un siglo amasando , como nos gusta decir , es de marcado carácter familiar, pero la verdadera artífice es Doña Margarita González Suárez que la ha regentado durante más de 50 años para ella mi pequeño homenaje con estas lineas.
El texto siguiente fue el que presente ante la Asociación Cultural Pinolere
Una vida de trabajo unida al pan.
Margarita González Suárez representa la tercera generación de panaderos, nace en
Aquella niña crece entre sacos de harina y horneadas de pan empapándose de las buenas artes del oficio de panaderos. Aquellos tiempos de la posguerra eran muy duros y difíciles, todos los miembros de la familia colaboraban en las faenas del obrador incluso ella, la más pequeña de las cuatro hermanas. en aquella época compaginaba su estudios básicos en la escuela de primaria de
Los hornos eran de leña traída del monte, descargar, almacenar y volver a cargar para alimentar el fuego para las hogazas, trabajo duro y sin descanso. La masa del pan se elaboraba a mano, así como heñir, (dar forma al pan) y restos de labores , y los repartos en burro.
Muy joven con apenas 19 años se queda huérfana de madre, y tres años más tarde, de padre, con 22 años ya había perdido a sus progenitores. Continua trabajando en la panadería bajo la tutela de sus hermanas mayores. En 1960 se casa con Nicolás Araque Gil. El joven matrimonio da un nuevo impulso a la panadería, (situada en el mismo inmueble de sus padres 1927) se compran las primeras máquinas y se moderniza el horneado así como los repartos adquiriendo su primer vehículo un “ 4 latas “
En la década de los sesenta se inicia el despegue del lo que más tarde se sería el “boom turístico del Puerto”
Esas décadas de esplendor años 60 y 70 son de gran desarrollo y actividad económica se modernizan los procesos productivos pero siempre manteniendo el carácter tradicional. A finales de los años setenta y junto con su hermana Agustina comienzan la recuperación de las “típicas tortas de millo de carnavales “ . Hoy podíamos calificar este hecho como un rescate etnográfico de carácter gastronómico.
Otro hecho destacable en la vida profesional de Margarita es su constante colaboración con los actos populares, en ese sentido, continuó la tradición de su madre doña Concha, que era ni más ni menos la encargada de la elaboración del pan del Arco de San Isidro de las Fiestas Patronales de
No es posible hablar de Margarita “la panadera” , la hija de “Pancho el cojo” sin mencionar las sus tortas de manteca. Tortas que son en referente de la confitería tradicinal de
Margarita ess hoy en el 2011 un referente auténtico del buen hacer en el obrador con sus manos y su corazón, manteniendo la esencia de las panaderías de
En
No podía terminar sin agradecer a la Asocianón Cultural Pinolere y al Ayuntamiento de la Villa de La Orotava este premio tan especial, así como mi felicitación al resto de panaderías: Jovita, Machado, Valladres, León, Marrero, Barroso, Los Nuñez, Santiago, Paez Mesa.
¡Qué buena lectura! ¡Qué mágico es leer estas entradas y volver al pasado! Gracias por compartir.
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